Así como las mujeres cuentan con etapas cada mes donde son más fértiles, así también las gatas cuentan con ciclos donde son más receptivas al macho para reproducirse. El celo, como es conocido popularmente, es ese tiempo en donde el organismo de las gatitas se prepara para aparearse con un gatito, lo que trae cambios en su cuerpo, comportamiento y actitud.
Es muy importante si eres amo de una gata que conozcas más a fondo sobre este tema, así podrás entenderla y cuidarla. Es por eso que en Petys® hemos consultado sobre los síntomas del embarazo, los cambios en la conducta y los cuidados que debes tener con tu gatita, a continuación, te los contamos.
El celo en las gatas
La pubertad llega a las gatitas entre los 6 y 9 meses aproximadamente, aunque en algunas razas puede presentarse a los 4 meses o puede tardar más, cuando se presenta su primer celo, este seguirá dándose durante toda su vida.
En este tiempo el organismo reproductor de las gatas está preparado para la recepción de espermatozoides, este ciclo tiene una duración entre 3 a 7 días cada 10 a 15 días. Ten muy presente que como el ciclo menstrual de todas las mujeres no dura lo mismo, así también pasa con las gatas, por eso debes de estar muy pendiente de tu mascota para conocer su cuerpo y ciclos.
Las gatas manifiestan el celo de diferentes maneras, debido a que buscan llamar la atención de los gatos, por eso su cuerpo, estado de ánimo y comportamientos cambian por esos días. Como amos debemos conocer muy bien estos síntomas, para que podamos comprender a nuestras mascotas y prepararnos para este tiempo.
Síntomas de embarazo en las gatas
Hay varias señales en nuestras mascotas que pueden indicar que están en embarazo ya que su organismo actúa diferente pues se prepara para la gestación. Recuerda que el embarazo en las gatas puede durar entre 61 a 70 días, aunque no sepas el momento en que comienza su embarazo con ayuda de tu veterinario podrás conocer el momento de su parto. Ten presente que tu peludita puede engendrar entre 3 a 6 gatitos dependiendo de la raza puede variar.
A continuación, te contaremos cuáles son los síntomas más comunes en las gatas que están en embarazo.
Los veterinarios dicen que entre la semana 3 o 4 de embarazo podemos descubrir si las gatitas están preñadas, uno de los signos más notorios es que sus mamas aumentan, se enrojecen, y su celo se suspende temporalmente.
Su abdomen comienza a aumentar notablemente ya que los embriones de la camada ya comienzan a ganar tamaño, y por ende incrementa el peso de la gatita. Así como pasa con las mujeres, a las gatas les puede dar mareos, náuseas o vómitos, ya que está presentándose alteraciones en su organismo, si este síntoma ocurre con frecuencia consulta con tu veterinario.
Las gatitas requieren de más energía, esto hace que su apetito aumente, se cansen con mayor facilidad y pasen más tiempo dormidas.
Debido a los cambios hormonales, puede que el comportamiento de tu gata cambie un poco. Cada una es diferente y no se puede predecir cómo reaccionará, por lo que podría tornarse más dócil o más arisca o agresiva. Lo que sí es seguro, es que uno o dos días antes del parte, la gata se notará visiblemente nerviosa.
Recomendaciones para cuidar una gata en embarazo
Si sospechas que tu gata está embarazada, lo primero que deberás hacer es llevarla al veterinario para confirmar el diagnóstico, de igual forma no todos los síntomas que describimos anteriormente son señales de embarazo, tu gatita puede estar enferma, por eso te recomendamos ser diligente y consultar rápidamente a un experto.
Evita vacunarla, desparasitarla o darle medicamentos durante su embarazo. Las vacunas, en particular, pueden ser muy peligrosas para ella o sus gatitos durante la gestación. Recuerda que, ante cualquier duda, lo mejor es consultar a tu médico veterinario.
Aliméntala muy bien, ten en cuenta que el organismo de tu gatita necesita componentes calóricos, vitamínicos y que le produzcan energía. Puedes encontrar en el mercado snacks que complementen su dieta.
Durante el embarazo cuida de tu gata, consiéntela si notas que quiere de tus mimos, pero también respeta sus espacios, los felinos se estresan fácilmente y evita los juegos bruscos.
Tu gatita, aunque sea primeriza, es capaz de ocuparse del parto por sí misma, pero te aconsejamos que en los días que se aproxima su parto estés pendiente de sus comportamientos. Puedes notar a tu gatita inquieta, con respiración agitada y contracciones en su abdomen, lo más importante es que cuentes con el acompañamiento de un experto.
Si quieres que tu gato no tenga crías, esterilízala. Tú como amo eres responsable del bienestar de tu mascota, por eso te aconsejamos que consultes con tu veterinario y se pueda realizar el procedimiento. Esto traerá tranquilidad para ti y tu mascota.
Cuidados de higiene para una gata en embarazo
Recuerda que es muy importante en el embarazo cuidar de tu gata, entre baño y baño puedes limpiarla con nuestros Pañitos Húmedos Petys® Clorhexidina, libres de fragancia especiales para pieles sensibles, este producto es ideal para limpiar las zonas más delicadas en el cuerpo de tu gatita, también puedes usar los Pañitos Húmedos Petys® con Fragancia, ambos humectan el pelaje de tu mascota y son hipoalergénicos.
Además, mantén muy limpia su arena, las gatitas en el embarazo son más sensibles a los olores, por eso te recomendamos que uses Arena para Gatos Petys®, que controla los malos aromas, tiene una agradable fragancia y con su poder aglomerante encapsula los líquidos de tu mascota. También puedes mantener una fragancia fresca en casa con nuestro Eliminador de Olores Petys®, que elimina el 99.9% de microorganismos que producen los malos aromas. Recuerda que nuestros productos de aseo y limpieza para tu mascota puedes comprarlos Cuídate en Familia.
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